martes, 20 de marzo de 2012

Fiesta de Galletas de Pascua (¡Temporada de Patos! ¡Temporada de Conejos!)

 
Temporada de Patos! Temporada de Conejos!


Siempre que llegamos a esta temporada primaveral de Pascua, me acuerdo de el episodio de Bugs Bunny "Temporada de Conejos". A pesar de que sé cómo terminará, no puedo evitar reirme cuando el pato Lucas recibe el disparo. Me gusta la forma cínica que tiene el conejo de engañarle, y la infantil inocencia del pato dejándose engañar. 
Cuando hice estas galletas, no podía dejar de pensar en ello. A pesar de que los conejitos y los patos de esta colección Galletas de Pascua no tienen nada que ver (quizás se acercan más a la romántica visión de Beatrix Potter en "Peter the Rabbit"), me gusta creer que podrían comportarse así si fueran unos dibujos animados...

Son todos diferentes porque cree la galleta a partir de un cortador de gato y luego les añadí las orejas. ¡Gatonejos!







¡Pero bueno! ¡Si yo no quería hablaros de esto!...

Hoy de lo que  realmente quería hablaros es de la FIESTA DE PASCUA que hacemos cada año para los niños.

Un pato, un cuadro y otro pato.




 Todas las Pascuas solemos organizar una fiesta con los niños en el jardin de la casa de mis padres en Asturias. Escondemos huevos cocidos, galletas decoradas (Envueltas en celofán!) y unos huevos de plástico de colores que me traje de Nápoles hace tiempo. El jardín (¡O la casa, si llueve!) se llena de primos, hermanos y amigos y cuando damos la salida, todos salen corriendo como locos a buscar su premio. El que más objetos reúna, gana un regalito útil (Un libro, unas pinturas...), aunque siempre tenemos alguno más preparado para los pequeños que aún no entienden que sólo puede ganar uno.

Una flor y unas zanahorias

Luego, nos vamos a la mesa de la cocina y con los huevos cocidos, preparamos todo un festival de decoración. Los niños los pintan con pinturas, les ponen pegatinas y los más mañosos, consiguen colocarles un lazo.
Mariposas y Oveja

Y mientras los dejamos secar, ponemos un buen chocolate para los niños y café y té para los mayores, y nos sentamos todos a comer las galletas decoradas que los niños han buscado por el jardín.

Esta fiesta, es sin duda alguna, mi favorita de todas. 

Y ahora, la receta de las galletas de Pascua.

Galletas de Pascua de Canela /Limón (Integrales)

-100 gr de azúcar moreno
-100 gr de azúcar blanco
-200 gr de mantequilla sin sal
-1 huevo L
-250 gr de harina de trigo
-150 gr de harina integral
-1 cucharadita de Canela o 1 cucharadita de ralladura de cáscara de limón.
- Media cucharadita de sal.

Batimos los azúcares con la mantequilla hasta que formen una masa homogénea. 
Añadimos el huevo y batimos con la mantequilla y el azúcar hasta que se integre en la masa.
Mezclamos en un bol las harinas con la canela o el limón y la sal. 
Vertemos la harina poco a poco en la mezcla de la mantequilla hasta que quede una masa fácilmente trabajable. La sacamos del bol a una mesa espolvoreada de harina y la trabajamos un poquito más (No mucho, sólo que no se nos pegue).
Por último dividimos la masa en tres partes y cada parte la ponemos entre dos láminas de papel de horno. Las estiramos con el rodillo (¡Qué queden gorditas! Como medio dedo en horizontal... ) y las metemos en la nevera durante media hora más o menos.
Mientras reposan, calentamos el horno a 170º-180º y buscamos los cortadores que nos apetezcan para hacer las galletas.
Pasada la media hora, sacamos la primera porción, levantamos el papel que la cubre y cortamos la masa con los cortadores. 
¡Y al horno con las galletas! Dejádlas durante unos 9-10 minutos o hasta que empiecen a estar doradas por los lados.
Las dejamos enfriar en una rejilla y seguimos con las siguientes tandas.

¡Feliz Temporada de Galletas!!


martes, 13 de marzo de 2012

Cinnamon Roll Cupcakes: Especial Día del Padre I

 En Asturias tienen un dicho : " Es más fácil pasar de sardina a gallina, que de gallina a sardina." Pues bien, eso es lo que me ocurre a mi cuando pruebo un Cinnamon Roll en cualquier sitio. Que ya lo he probado mejor. Es más, puedo asegurar que he probado EL MEJOR. ¿Y dónde? En Jaarsma Bakery:
https://www.jaarsmabakery.com/
Jaarsma Bakery. Pella, Iowa. 


Es un sitio estupendo. Tiene un montón de especialidades holandesas exquisitas y elaboradas con las recetas que en 1898 trajó de Holanda el fundador de la pastelería. Es absolutamente maravilloso pensar que el hecho de mezclar harina, canela, azúcar y unos ingredientes más, den como resultado exactamente el mismo bollo de canela que aprendió a hacer de niño Harmon Jaarsma hace más de 100 años. ¡Es como un viaje en el tiempo!
Por eso, a menos de que viajes a Iowa y pruebes sus bollos de canela, yo os recomendaría como segunda opción estas cupcakes para regalar el Día del Padre. La receta está basada en una que encontré en la revista Better Homes. Su sabor es sorprendentemente similar al bollo de canela y tiene el aliciente de que no hay que dejar levar la masa ¡Probadlo!





Cupcakes de Canela y Nuez con Crema de Mantequilla y Nata dulce.
LLevan poca crema porque ¡saben tanto a cinnamon roll que sería una pena esconder su sabor!

Ingredientes y elaboración ¡Todo a la vez!. (Antes de ponerte con la elaboración, enciende el horno a 180º)
  • 220 gr de harina con levadura
  • 110 gr de harina normal
  • 1 cucharadita de sal
Mezclamos las harinas y la sal en un bol y reservamos. Sigamos...
  • 80 gr de azúcar moreno
  • 50 gr de nueces picadas
  • 2 cucharaditas de canela en polvo
Mezclamos estos tres ingredientes en otro bol y reservamos. Sigamos de nuevo con la batidora de varillas...
  •  60 gr de mantequilla 
  • 350 gr de azúcar blanca
Los mezclamos bien durante un par de minutos y vamos añadiendo los siguientes ingredientes:
  • 2 huevos
  • 1 tapón de vainilla
Y ahora vamos intercalando en la mezcla anterior:
  • 230 ml de leche
  • La mezcla de las harinas.
Cuando ya tenemos todo bien mezclado y hemos obtenido una masa homogénea -debes limpiar las paredes un par de veces con una espátula para no perder nada de las harinas en la mezcla- ponemos las cápsulas en los moldes y vamos rellenando de la siguiente manera CADA CÁPSULA:
  • 1/4 de cápsula con la masa de las cupcakes
  • Una cucharada de la mezcla del azúcar, canela y nueces
  • 1/4 de cápsula con la masa de las cupcakes
  • Una cucharada de la mezcla del azúcar...
Las metemos en el horno durante unos 25 min a 180º. ¡Os van a sorprender! ¡Saben igual que los bollos de canela, pero sin tener que esperar al levado de la masa!
¡Maldición! No se aprecia, pero en el corte debería verse: Cupcake, canela, cupcake, canela...

 Ingredientes y preparición de la Crema de Mantequilla y Nata dulce.

Mezclamos con las varillas hasta que quede una crema esponjosa y consistente (Unos 5 minutos):
  • 250  gr de mantequilla a temperatura ambiente
  • 250 gr de azúcar glass
Y  ahora añadimos tres cucharadas de nata montada sin azucarar y batimos durante otros 3 minutos.

Las tres con la nuez las hice con la misma masa, pero sin añadir las capas de canela. Simplemente, llevaban unas nueces picadas en el interior. ¡Estupendas y más sencillas!
 Un truco: Se puede añadir a la crema una cucharadita de Sirope de Arce (El de las tortitas). ¡Le da un sabor que casa tan bien con la canela...!

lunes, 5 de marzo de 2012

A Cake in a Jar: Una nueva forma de comer tarta.

Ahí está. A Cake in a Jar





Estos días he estado haciendo de detective tratando de dar con la historia de esta estupenda manera de cocinar (y comer) tarta.
Lo primero que hice fue buscar en Google (¡Por supuesto!) y llegué a  una página americana de lugares con estilo para salir en Nueva York y Los Ángeles que habla de ello en 2008: Urban Daddy. Pero todo lo que decía era que lo hacían en un restaurante estupendo y maravilloso. Hummm... no me servía...

Como veis, el nombre es muy gráfico: A Cake in a Jar (Pastel en un tarro). Simple y llanamente.Así que me costaba creer que el invento viniese de un cocinero. Me sonaba más a ama de casa americana con niños corriendo por la casa y pensando que hacer con los 20 kg de harina que están a punto de caducar en su despensa.

Pues bien, ya que por primera vez en mi vida Google no me daba la respuesta que estaba buscando, cogí el teléfono, marqué el número de mi abuela en Iowa, volví a colgar porque me di cuenta de que allí eran las 3 de la mañana y esperé hasta la tarde para volver a intentarlo. A eso de las 8 de la tarde hora española pude hablar con ella y le pregunté si alguna vez había hecho un Cake in a Jar y si sabía de dónde podía venir esta técnica. Pues bien, a la primera pregunta contestó que no  pero me contó una pequeña historia para contestarme a la segunda:

En la Guerra de Irak, los pasteles metidos en frascos y herméticamente cerrados, eran enviados por las esposas de los soldados a sus maridos en el frente. De esa manera, llegaban frescos y jugosos. Y lo que es mejor: Podían guardarlos durante más tiempo que un bizcocho simplemente envuelto en papel de plata.

Cake in a Jar de Fresa, salsa de fresas y nata. Yo utlicé este tipo de tarro, pero se puede hacer con uno de conserva que tengáis por la cocina.

¡Vaya! Eso no me lo esperaba.

Con este dato volví a buscar en Google y encontré la historia que mi abuela me contó en el blog "Loving a Soldier" ("Amando a un soldado") y la entrada era de ¡2007!.
No me negaréis que no es una historia genial. 

La receta:
Bizcocho de Fresa: (Utilicé una receta que conseguí hace tiempo en Internet, ¡pero no recuerdo donde! e hice unas pequeñas variaciones)

  • 4 Huevos
  • 180  grs azúcar blanca
  • 40 gr de azúcar moreno
  • 200 gr de harina de trigo
  • 50 gr de harina de maiz amarilla.
  • 1 sobre Levadura
  • 50 grs aceite de girasol
  • 1 yogur Dalky de fresa y nata.
  • 250 grs Fresas
Trituramos las fresas y reservamos. En la batidora, mezclamos los huevos con el azúcar blanco y moreno durante unos tres minutos. A esta mezcla, añadimos el aceite y el yogur.
Separadamente, mezclamos las harinas con la levadura y añadimos a la mezcla líquida anterior.
Por último incorporamos el puré de fresa y mezclamos bien hasta conseguir una masa de bizcocho.
Y ahora viene la gran pregunta: ¿qué hacemos con el tarro? ¿Echamos la mezcla sin más?
No. Primero pincelamos el tarro con aceite para que no se nos pegue el bizcocho, le quitamos la tapa (para que no se estropee la goma) y entonces echamos la mezcla en su interior hasta un poco menos de la mitad. (Luego subirá, no mucho, pero subirá)
Preparamos una fuente de horno con agua hasta la mitad e introducimos el tarro para que se cocine al baño María en el horno precalentado a 180 º.
Dejamos que se cocine durante unos 40 min o hasta que el cuchillo salga limpio.
Esta receta da para dos tarros medianos. 

Como sólo tenía un tarro, el resto de la mezcla la utilicé para bizcochitos.
Cuando esté cocinado, sacáis el tarro DENTRO  del baño María y lo dejáis enfriar todo junto a temperatura ambiente durante un par de horas.

Cuando esté frío, entonces podéis añadir lo que os apetezca. En este caso, hice una especie de Coulis de Fresa sencillo, mezclando en un cazo 250 gr de fresas trituradas con tres cucharadas de azúcar y medio vaso de agua y dejándolo calentar lentamente sin dejar de remover, durante unos diez minutos para formar una salsa ligera que luego añadí al bizcocho cuando aún estaba templada para que lo empapase bien.

Por último, lo volví a dejar enfriar y le añadí nata montada y unas fresas enteras como adorno.

Lo guardé en la nevera durante seis horas para que todos los sabores se entremezclaran ¡y el resultado fue espectacular! ¡No dejéis de probarlo! Es dulce, sabroso, jugoso y ¡tan bonito!
¡Ah! Y se come dentro del tarro, con una cuchara. ¡Cómo si fuera un yogur!