viernes, 8 de junio de 2012

Un tutorial de galletas y unos niños muy felices. (Galletas de Canela y Vainilla)

 
Melody Gardot: Un poco de tranquilidad en el ambiente antes de la locura.
El jazz amansa a las fieras y a los niños.

Creo que los padres en general, aunque hay maravillosas excepciones, tendemos a tratar los juegos con nuestros hijos de una manera... ¿cómo lo diría yo?... Aséptica. Y sí, aséptica como los hospitales o el colirio. No queremos que se manchen, que estropeen la ropa, que se rebocen o toquen cosas "sucias" con las manos. Si nos fijamos, no solemos dejar que su cuerpo esté en contacto con nada que no sea ropa o sus asépticos juguetes: Si tocan la arena, que sea con una pala. Si caminan por la hierba, que sea con zapatos. Si llueve, ya no podemos salir a la calle, a pesar de tener chubasquero, botas de agua y hasta un paraguas.
Entonces... yo me pregunto... ¿no estaremos tomando demasiada distancia? ¿Qué hay de las experiencias físicas? De tocar, rebozar, probar...
Entiendo que no queramos que se estropeen el pantalón y los zapatos por meterse en un charco hasta las caderas, ni que les pique un escorpión por caminar descalzos por el campo. Genial. Estoy de acuerdo. Pero entre eso, y la burbuja sensitiva en la que los tenemos encerrados- no todos los días, ni a todas horas, pero sí en general y con una cadencia ascendente- hay un trecho y muchas actividades que se pueden hacer, como por ejemplo, estas deliciosas y sencillas galletas de canela y vainilla sin Thermomix, ni amasadora ni ningún cacharro que no tengamos normalmente en casa, para que los niños toquen, amasen, se embadurnen y ¡SE DIVIERTAN!.

Galletas de animalitos (o si no tenéis cortadores, un vaso sirve) de Canela y Vainilla. 
Receta de Biscuiteers. Un libro estupendo de galletas http://www.amazon.es/The-Biscuiteers-Book-Iced-Biscuits/dp/1856269418

 -350 gr de harina normal
-100 gr de harina con levadura

Y los mezclamos en un bol (o en un tupper...)



 Ahora echamos el azúcar:
-140 gr de azúcar blanca.

Y también la canela:
-1 cucharada grande de canela.

Y mezclamos como si no hubiera un mañana. (Al menos ellos lo hicieron así. ¡Qué ímpetu!



Pasamos las mezcla anterior a un bol grande y añadimos la mantequilla en trocitos.
-125 gr de mantequilla con sal (si no tenemos, pues sin sal y añadimos la sal a la harina. Una cucharadita)

Y con las manos, vamos mezclando la mantequilla con las harinas pellizcandolas juntas hasta que quede como una especie de pan rallado.
Los niños apretaron como si la mantequilla les deberia dinero, y aún así, salió perfecto.
Lo mejor: las risas al verse tocando todo aquello ¡y animados por un adulto!

Tiene que quedar con este aspecto.

Le hacemos un hueco en el centro.

Y ponemos un huevo, un par de tapones de vainilla y Golden Syrup (Venta en La tienda americana y alguna otra más). Si no tenemos, lo sustituimos por la misma cantidad de miel.


-1 Huevo
-2 tapones de Vainilla
-125 gr de Golden Syrup o de miel.

Y con un tenedor, desde el centro, vamos incorporando la harina a los líquidos con movimientos circulares, hasta que quede una masa firme y no se pegue a los dedos.
 Este es el aspecto de la masa. Bueno, de la mitad, porque hubo que repartirla, claro.

Hacemos pelotas como en la imagen y partimos cada una en dos.

Y la ponemos entre dos papeles de horno para estirarla con el rodillo.
La estiramos así y mientras tanto, aprovechamos para encender el horno, arriba y abajo a 180º.
Precaución: No te olvides de sacar todas las bandejas porque las vas a necesitar para poner las galletas antes de meterlas en el horno.

La masa tiene que quedar con este espesor. ¿Os hacéis una idea? Yo creo que debe de ser como un lápiz poco más o menos.
Guardamos las cuatro masas estiradas entre dos papeles en la nevera unos veinte minutos.
Sacamos de una en una y vamos cortando con el cortador que queramos (Repito: vale un vaso, un cuchillo...) y dejándolas en la bandeja (cubierta con un papel de horno) con un poco de separación para que no se peguen.
Las metemos en el horno 7 minutos de reloj y las sacamos.
Así veis cómo quedan por arriba y por abajo.

Y los niños... pues ni tan sucios como cabría esperar, y tan contentos y felices como creía que estarían.

(¡Ah! Y orgullosos como pavos de su logro!)

¡Qué os ensuciéis bien!!!

2 comentarios:

  1. Esto nos lo tenías que haber enseñado en enero... Me parece el plan ideal para la típica tarde de sábado con tormenta, frío y sin plan "original" que les sorprenda. Lo probaremos! Por cierto, pregunta de una inculta: ¿Dónde se compra el papel de horno? Se nota lo que me gusta la cocina, eh?

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  2. Ya!!! Es verdad! De todas maneras, Elisa, yo no estaría muy segura de que Junio vaya a venir estupendo... Aún tendrás alguna oportunidad. Ya verás.
    El papel de horno se compra en cualquier supermercado y está al lado del de aluminio y el film. También se le llama "Papel Sulfurizado". Es blanco y suave al tacto.
    Yo lo utilizo para cualquier alimento que vaya a cocinar directamente en la bandeja del horno y también como base en los moldes de los bizcochos, pudings... ¡Así no se te volverán a pegar!

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